“Que hablen los cuidadores. Que alcen la voz. Que no tengan miedo, ni tan siquiera un ápice de vergüenza, de hacerlo. Que saquen a sus dependientes a la calle. Que la sociedad los vea: a unos con los obstáculos con los que la vida se lo ha puesto un tanto más complicado que al resto, y a los otros, desempeñando ese papel tan intenso y emocionalmente complejo de quien camina al lado de los más necesitados y que tanto sufre en silencio sin quejarse».
Los cuidadores no se quejan. Lloran. Maldicen. Alcanzan el colapso. Se endurecen por fuera mientras su interior se va rompiendo en cientos de añicos. Necesitan comunicar y ser comprendidos. Ríen. Gritan. Se desesperan. Pierden los nervios, los papeles y la paciencia porque todo cerebro tiene un aguante y su propio tope límite de presión antes de que estalle. Piden mil y una disculpas. Se flagelan. Se culpan. Se castigan. Son los primeros en ser críticos y exigentes con ellos mismos«.
Saldrían corriendo sin mirar atrás en breves coyunturas de lógica sobresaturación. Se asfixian por la responsabilidad y el dolor. Y, aún así, continúan avanzando desde el amor más incondicional que exista, transmitiendo y dando todo lo que les es posible dar, dentro de cada una de sus posibilidades y propias limitaciones. Pero quejarse, no se quejan. Aprenden a callar, tragar y a actuar mejor que nadie. Porque para ellos, el afectado, su ser querido, siempre será lo primero y estará por encima incluso de su propia salud”.
Pablo A. Barredo, fundador de Diario de un Cuidador
Qué mejor manera de presentar la segunda parte de la campaña del Plan de Sensibilización #paliativosvisibles de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos (SECPAL) en colaboración con la Asociación de Enfermería en Cuidados Paliativos (AECPAL), que este maravilloso texto de Pablo A. Barredo. Tras la jornada dedicada al cuidador, desde SACPA, nos unimos a esta campaña y os animamos a participar, compartir y contar vuestras historias en las redes sociales.
Esta vez, el hashtag elegido es #genteDcuidado, «con la D mayúscula de DAR en medio, porque son los cuidadores son expertos en DAR de forma desinteresada. Esta campaña es una INVITACIÓN, queremos hablar de CUIDADORES, así con mayúsculas y queremos que ellos hablen, que nos cuenten sus historias; historias de cuidado desinteresado que se va aprendiendo conforme pasa la vida y se sigue aprendiendo cuando se va acercando el final. Hablaremos también de profesionales que están al lado de los cuidadores haciendo de soporte, como son los trabajadores sociales. Y no nos olvidaremos de las historias de los que un día fueron cuidadores, pero cada día siguen mirando esas sillas vacías que traen tantos recuerdos».
Participa, comparte y cuenta tu historia como cuidador. Ayúdanos, de nuevo, a hacernos visibles.
Toda la información en InfoPaliativos
Imagen de la campaña: SECPAL